El ya ex presidente del CD Egabrense, Jorge Morillo, ha comparecido junto al hasta ahora secretario del club, Rafael Poyato, y parte de su junta directiva, para comunicar su dimisión irrevocable y la de las personas que junto a él han llevado los designios del club en los últimos seis años. De esta manera, Morillo no podrá ver completado su proyecto, que comenzó en 2017 y que se ve paralizado de esta manera en mitad de su camino “sin saber por qué”, según han dicho en varias ocasiones tanto el propio Morillo como Rafael Poyato.
No existen motivos aparentes que les ha llevado a tomar la decisión de dimitir de forma “irrevocable” tanto es así que según ponía de manifiesto Morillo, “nos vamos sin saber por qué”, aunque lo achaca a “envidias, calumnias y mentiras” que la directiva lleva “aguantando” desde hace mucho tiempo. A pesar de ello, Morillo añadía que en la última asamblea celebrada esta misma semana (martes) se dio cuenta de la gestión a los socios y no se recibió ningún “reproche tanto en lo económico como en lo deportivo”
Ahora se abre un nuevo escenario en el fútbol de esta localidad de la Subbética. A priori una junta gestora se hará cargo de la casi centenaria institución deportiva en fechas recientes, y se valorarán diversos temas importantes para el futuro del balompié egabrense. Uno de los más destacados es la futura relación con el otro club de fútbol de la localidad, el CD Egabrense FB, que ahora podría tomar otras vías de colaboración viendo los últimos acontecimientos..
