Fuente-Tójar es desde este viernes el único municipio de la Subbética cordobesa que mantiene su hostelería y comercio no esencial cerrado al superar la tasa de incidencia acumulada de 1.000 casos por cada 100.000 habitantes.
Mari Fe Muñoz, alcaldesa de la localidad, ha sido muy contundente y ha señalado el trato que están recibiendo los municipios pequeños por parte de la Junta de Andalucía: "Nos parece excesivo cómo nos están tratando. Vas a poblaciones más grandes que hay muchos más casos y ves las terrazas a tope, llenas de gente, y no hay ningún problema".
"En Fuente-Tójar, a día de hoy, como mucho tenemos dos o tres casos activos y controlados. Aquí hay dos tenemos dos bares solamente, del que viven dos familias numerosas, que es su comida de cada día y que viven de eso", ha señalado la regidora tojeña, quién no entiende que se aplique el mismo baremo a un municipio como Fuente-Tójar de menos de 700 habitantes que, por ejemplo, una capital de provincia.
De este modo, asegura que "no se puede mantener un municipio cerrado a cal y canto cuando sólo tenemos algunos casos controlados. He trasladado mi disconformidad a la Delegada territorial de Salud y Familias en Córdoba y también lo he hecho llegar de manera formal a través de un escrito".
"A los municipios pequeños nos están hundiendo. Se habla mucho de luchar contra la despoblación, cuidar las zonas rurales y de esta manera la Junta de Andalucía nos está hundiendo. Es muy fácil tomar estas medidas desde un despacho en Sevilla o Córdoba. Hay que pensar un poco en las personas y ahora mismo no se está pensando en las personas, al menos en los pueblos pequeños", ha sentenciado Mari Fe Muñoz.
