Las escasas precipitaciones que han caído en los últimos meses en la Subbética cordobesa hace que el pantano de Iznájar afronte el verano en una situación que, aunque no es preocupante, sí es a tener en cuenta. Y es que el embalse más grande de Andalucía se encuentre actualmente a un 31% de su capacidad total con 309 hectómetros cúbicos embalsados.
La situación no es buena si se compara con otros años, a estas alturas del mes de junio. Y es que, por ejemplo, el año pasado se encontraba por estas fechas al 44,3% de su capacidad con 435 hectómetros cúbicos. Es decir, a medidos de junio de 2020 contenía 126 hectómetros cúbicos más de los que tiene actualmente, una cantidad nada desdeñable.
Si nos vamos más atrás en el tiempo, la comparativa no mejora. Y es que la media de los diez últimos años en el pantano iznajeño eleva esta cantidad de agua embalsada hasta los 717 hectómetros cúbicos, afrontando esta recta final de la primavera e inicio del verano a más del 70% de su capacidad.
Esto quiere decir que este año 2021, el pantano más grande de Andalucía contiene un 40% menos de agua de la que ha contenido de media, a estas alturas del mes de junio, durante la última década.
