El Ayuntamiento de Lucena solicita a la Junta autorización para implantar en la factura del agua un canon de mejora

Aguas de Lucena invertirá lo recaudado por este canon en la construcción de una nueva conducción de agua desde Zambra, dado que la actual tiene pérdidas del 50% del caudal

El Pleno del Ayuntamiento de Lucena ha aprobado solicitar a la Junta de Andalucía la autorización para el establecimiento de un canon de mejora para la financiación de las obras de renovación de la conducción de agua potable procedente de la captación de Zambra.

A instancias de Aguas de Lucena, el Consistorio lucentino viene trabajando en los últimos meses en la financiación de este proyecto que supondrá la instalación de una nueva red que transporte hasta los depósitos de La Calzada el agua desde el manantial de Zambra, dado que la actual infraestructura, con más de 60 de años de antigüedad, presenta un deterioro con pérdidas de agua de hasta el 50% a lo largo de su extensión de 22 kilómetros, según analizó la Universidad de Granada en un estudio redactado en 2018. 

La instalación de una nueva conducción se estima en un presupuesto de 7.236.402 euros, IVA incluido, y vendría a solucionar el tema de las habituales compras de agua potable por parte de Aguas de Lucena, que en los últimos años viene pagando, de media, alrededor de 1,2 millones de euros en compras de agua potable para garantizar el suministro de la ciudad.

La fórmula elegida para la financiación de estas obras consiste en el establecimiento de un canon a pagar por todos los clientes de Aguas de Lucena que permita hacer frente a un préstamo avalado por el Ayuntamiento con un plazo de amortización de 15 años. Según los cálculos municipales, este canon se empezaría a pagar en 2022 con una cuantía, para una familia tipo de 4 personas y un consumo de entre 45-50 metros cúbicos, de 9 euros en el recibo trimestral. 

El estudio financiero-económico elaborado por Aguas de Lucena también anuncia, al margen de este canon, un incremento de las tarifas del agua de un 5% para el año 2029, antes se descarta que haya nuevas subidas, para actualizar entonces los precios del agua al IPC que exista en ese año tras los incrementos que se vaya originando desde la actualidad. 

Toda esta operación, aprobada anoche en la sesión plenaria con los votos a favor de PSOE, Ciudadanos, Vox e IU y el voto en contra de PP, queda pendiente ahora de la autorización necesaria por parte de la Junta de Andalucía, cuya respuesta se espera para “un plazo de entre 1 y 2 años”, según avanzó el alcalde, Juan Pérez.

Desde el PP, María de la O Redondo, justificó el voto en contra de su partido en “que si bien es necesario realizar esta nueva infraestructura, se ha optado por la solución más perjudicial para el ciudadano”, al tiempo que advertía que “quizás no sea el mejor momento de pedir este préstamo para iniciar esta operación porque ese dinero dentro de seis meses tal vez se necesite para otras cosas viendo la situación actual”. 

En este sentido, Juan Pérez recordó que “ahora no aprobamos pedir un préstamo ni avalar ese préstamo, sólo pedimos autorización a la Junta de Andalucía” y que corresponderá al Pleno “cuando tengamos la respuesta decidir si es o no el momento de poner en marcha esta obra”. El primer edil remarcó que “la máxima prioridad del ayuntamiento ahora es atender a la gente, dotar de recursos a Servicios Sociales para responder a todos los casos de vulnerabilidad social”, pero “esta realidad no nos debe de apartar de otro tipo de proyectos u obras que también son necesarias para la ciudad”. 

Desde Vox, el portavoz Antonio Hidalgo respaldó el establecimiento del canon por “tener una cuantía pequeña, un periodo de amortización también pequeño y porque se invierte en una infraestructura muy necesaria”. Miguel Villa, en nombre de IU, señaló que “los costes del servicio de agua deben sufragarse por los usuarios que se benefician de ese servicio” y matizó que “vía canon o vía presupuesto del Ayuntamiento, son los ciudadanos los que sufragarán la obra”.